Diego Berrueta

(This is a reprint of the original post)

Después de once días de saludable cambio de aires, regreso al mundo digital. Han sido casi dos semanas de desconexión de la rutina de los últimos meses. Salvo un par de días, el tiempo ha acompañado con unas temperaturas muy agradables, lo que me ha permitido dar paseos por los valles y las montañas casi todos los días. También he tenido la oportunidad de ver uno de los dos cometas a los que aludía en mi anterior entrada en la bitácora (el otro sólo resultaba visible en la hora anterior al amanecer, y me faltó la determinación necesaria para hacer el esfuerzo).

En el pueblo, las cosas parecen suceder más despacio. Nadie tiene prisa, y los días son suficientemente largos. Y eso me ha permitido, además de dar esos largos paseos, practicar un poco con la guitarra, leer un par de libros, escuchar música, ver películas, realizar alguna chapucilla por la casa y, por supuesto, avanzar en mi proyecto. Me alegra poder anunciar que he avanzado bastante, y que por fin el proyecto funciona y tiene una forma que se parece mucho al objetivo perseguido. No está terminado, aún requiere algo más de trabajo, y sobre todo, escribir o pasar a limpio gran parte de la documentación. Pero el compilador por fin acepta y procesa programas en Curry con clases de tipos, y genera ejecutables que se comportan como cabe esperar.