Diego Berrueta

(This is a reprint of the original post)

Estaba yo a punto de ponerme a escribir sobre el viaje a Santander, cuando he recibido una llamada. Algo aún más desagradable que las personas que se equivocan al llamar y encima exhiben sus malos modales, es recibir una llamada de spam telefónico. Ya sabéis, eso que se llama telemarketing por no usar otra expresión relativa al sentido del tacto y los órganos sexuales. Pero no será hoy cuando arremeta contra el telemarketing.

La operadora se identifica como trabajadora de Telefónica (dudo mucho que lo sea, pero sigamos) y me pregunta si tengo ADSL (primer sinsentido de la conversación). Reproduzco a continuación la conversación de la mejor manera que me permite la memoria:

Operadora: Tal vez esté interesado en unos complementos para su servicio ADSL...

Yo (interrumpiendo): No, señorita. Lo que me interesa es que me arreglen el ADSL, que se corta desde hace años.

Operadora: ¿Sabías que puede que el problema esté en tu ordenador? ¡Podrías tener un virus!

Yo: No creo que sea ese el problema (empiezo a sospechar que los "complementos" que me quieren vender consisten en un antivirus).

Operadora (con tono algo pedante): ¿Cómo lo sabes? Seguramente sea que tienes un virus. También podría ser un troyano o un hacker. ¿Sabes que hay troyanos que pueden robar energía de tu ordenador a través del ADSL?

Yo (irritadísimo, pero educado): Estoy seguro de que el problema no tiene esa causa (ahora ya no sospecho que quieren venderme un antivirus; ahora estoy convencido). No quiero que vuelvan a llamarme hasta que hayan solucionado los cortes de mi ADSL. Adiós.

Y colgué, sin darle opción a réplica, que nos conocemos. La llamada me dejó de muy mal humor. Ni siquiera la extravagante idea de robar energía a través del ADSL me hace sonreír. La operadora estuvo tremendamente pedante, tratando de meterme miedo. No quise entrar en el juego y empezar a contarle todas las pruebas que tengo para sostener que los cortes de mi linea son culpa de Telefónica. Tampoco quise seguir la conversación y pedirle que me envie un antivirus y un firewall para Linux. No tengo tiempo para perder con estas chorradas.