Diego Berrueta

(This is a reprint of the original post)

Después de seis años como secretario de la Junta Directiva de AsturLiNUX, el pasado sábado cedí por fin el testigo. Lo recoge Nacho, a quien agradezco sus palabras, y que sabe que le ayudaré en todo lo que me sea posible. El cargo de secretario es bastante laborioso, y en los dos últimos años cada vez me resultaba más obvio que no disponía del tiempo suficiente para cumplir con los deberes con la eficacia que me gustaría. Muchas veces he sustraido tiempo de asuntos personales (como mis estudios, por ejemplo) para poder atender a esta y otras tareas que realizo para la asociación. Por tanto, necesitaba un respiro, aliviarme de algunas responsabilidades y ajustarme más a mis posibilidades.

Me tranquiliza que haya gente joven, como Nacho, que esté dispuesta a dar el relevo, y que aparezcan caras nuevas al frente de la asociación: ninguno de los cargos de la Junta actual participó en la fundación de la asociación. Es una pena que no tengamos una foto de aquel día, pero sí que tenemos una foto de la primera asamblea, unos meses después. Sirva también la foto para reconocer la labor de todos las personas que han pasado por la Junta, y en especial, de Morfeo, que también ha decidido ceder el paso después de otros seis años como Presidente. Sólo hay que contar las personas que aparecen en esa foto de 1999 y comparar ese número con los 50-60 socios que tiene ahora AsturLiNUX, para darse cuenta que la asociación ha prosperado.